«Hoy, cuando sigo viendo mi futuro incierto, siento que viene algo de inspiración y, en esa, la verdad es que, en el año que llevamos viviendo nuestra historia, tiene mucho que ver Jesús.

En confinamiento hemos cumplido un añito. Un año que hemos llenado de experiencias, risas, abrazos, besos, amor, fantasías cumplidas… y, lo que más me gusta de todo es que todavía nos quedan muchísimas otras fantasías por cumplir. Nuestro “proyecto” que vamos a llevar a cabo, como lo llamó ayer, me gusta como suena.

Jesús se confinó en un pueblo de una provincia diferente a la mía. Así que hemos tenido que esperar a que se pudiera pasar de una a otra para poder vernos (bueno, no… voy a confesar que se escapó un día para verme cuando pasamos a la fase 2) Desde que se puede viajar de provincia a provincia creo que nos hemos visto cuatro veces ya. Una de las veces, también la compartimos con Rocío. Parte integrante de este trío poliamoroso, la verdad es que, no se por cuanto tiempo. Esta situación que estamos viviendo crispa los nervios y da la vuelta a la cabeza a cualquiera y Rocío se está tomando un tiempo para pensar si sigue disfrutando con nosotros de la vida o no… así que, os lo iré contando. Mientras, espero que os pueda escribir también ese encuentro con ella que fue maravilloso, como siempre, pero hoy quiero relataros como fui follada ayer, en mi casa.

Cuando hace calor me molestan muchísimo las bragas. Me pongo un vestido sin tirantes, sujeto por una banda elástica a los pechos (tengo varios así), dejando al descubierto todo mi torso y debajo absolutamente nada. Además de ir muy fresquita, me pongo muy cachonda. El coño al aire me pide todo el día guerra. Me masturbo mucho más de la cuenta en esta época, y como no tengo  hombre cerca al que atacar, pues, me alivio con videos porno, mis dedos, mis juguetes, mis fantasías y mis recuerdos.

Pero ayer por la mañana pregunté a Jesús si antes de volver a su pueblo me iba a hacer una visita y, me dijo que si. Después de pasar por casa de Rocío y comer con ella, llegó a la mía a la hora de la siesta. Luego me dijo que con ella no había follado ese día. Bueno…. será verdad que se está pensando lo de seguir o no…. veremos.

Bueno, vamos a lo que vamos. Yo, claro, desde que sabía que iba a venir, el grado de salidez era sumo. Si normalmente estoy cachonda, ya no se deciros como estaba ayer…. Viene en moto, así que en cuanto entró por la puerta le dije que se quitara toda la equipación. Me moría por tenerle desnudo a mi lado y así lo hizo. Bufff… yo ya no podía más. Le dí un poco de agua, de pié en la cocina, después de beber agua los dos nos acercamos el uno al otro para fundirnos en un beso apasionado y profundo. Cuando nuestro aliento se agotaba y necesitábamos respirar sus manos, con un movimiento rápido bajaron mi vestido hasta la cintura dejando mis pechos al descubierto. De inmediato, se pusieron duros. Fue en milésimas de segundo. Recibiendo el aire cálido de la estancia, de repente con esa pasión añadida en el beso y en contacto con su piel llegó mi primer orgasmo. Hay veces que flipo conmigo misma. ¿Como puedo ser tan caliente y tan ardiente? No lo se, pero Jesús es una de las personas que activa en mi todo eso y, mucho más.

Nos sentamos en el sofá y con un par de frases dichas sobre el tema en cuestión sobre los tres, hacia donde va la relación poliamorosa, qué habían hablado ellos al respecto y demás….  esperando que alguno de los dos entrara en acción … por fin dijo: ¿Como te vas a colocar hoy para que te haga una buena comida de coño?

Ayyy, me chorreó el coño cuando oí eso!!!! . Cuando estuvo aquí antes de ayer no os podéis imaginar como me lo comió!!. El dice que disfruta muchísimo con eso, casi más que follando y, me lo creo porque se recrea de manera maravillosa. Le dije que fuéramos a la cama, la habitación es un poco más fresca e íbamos a estar más cómodos. La verdad es que la cama no estaba en los últimos meses dentro de nuestros sitios favoritos para follar. Siempre hemos ido a locales, en el coche, en su furgoneta… en los baños de los sitios a los que hemos ido… De tradicionales en ese sentido, no se nos puede tachar.  Así que, de vez en cuando tampoco está mal tumbarse en la cama y dejarse hacer.

Me encaminé hacia la habitación seguida por él y me preocupé de subir mi vestido y dejar mis nalgas al aire y bajarlo para dejar mis pechos tambien al aire… vamos… prácticamente iba desnuda. Le imaginaba por detrás, con sus ojos clavados en mis cachetes, pensando cómo iba a gozar de mi, en breves instantes.

Me tumbé boca arriba, abrí las piernas, él se quitó el calzoncillo, que era lo único que le quedaba puesto y puso esa cara de niño malo que me vuelve loca. Tuerce un poco su boca hacia un lado, le brillan los ojitos y acerca su mano a la polla para ver como la tiene de dura mientras me mira a los ojos y piensa lo puta que soy. Susurra que soy muy zorra, que, cómo me va a follar, cómo me lo va a chupar…. a mi me pone a mil por hora y espero con ansiedad ese primer roce de su boca con mi clítoris. Es brutal!!! Ya está erecto, esperando ese toque, ese placer, esa energía de su lengua que hace que me estremezca desde el primer segundo. No lo puedo controlar, abro mis piernas totalmente para exponerme del todo. No dejo nada para mi, se lo doy todo, le doy todo mi placer y así lo toma, doy y recibo, recibe y da. Un ciclo que mueve todo nuestro placer, nuestros cuerpos. Yo comienzo a estremecerme, agarro las sábanas con mis manos y me corro sin gritar mucho porque tengo vecinos pero me habría encantado poder llenar el espacio con mi voz para que el universo supiera el placer que estaba recibiendo de mi amor.

Nuestras miradas se cruzan de vez en cuando pero me apetece gozarlo con los ojos cerrados sin pensar en nada más que, en que tengo la boca del hombre de mi vida entre las piernas. Jesús cambia la intensidad de sus lametones, de sus mordiscos, si, si… me muerde y me encanta como lo hace! muerde y succiona, chupa a la vez, el aliento de sus narices tambien me da gusto, todo, todo todo me vuelve loca y abierta, abierta, muy abierta vuelve a crecer esa inmensidad de éxtasis de dentro de mi, explotando para soltar por todos los poros de mi piel ese orgasmo. El siguiente orgasmo fue mucho más intenso. Seguía chupando pero también introdujo sus dedos en mi coño, hasta el fondo, tocando donde tiene que tocar para que el placer venga de varios puntos y se junte como una gran explosión. Sucedió que, provocó un squirt para beberlo. Mi éxtasis formaba parte de mi placer, de mi propio placer mientras chorreaba el cálido líquido por mi ano y mojando las sábanas, con el saber de que se lo estaba bebiendo y eso le pone muy muy muy cachondo.

Sigo y sigo corriéndome, es sensacional este sentimiento. Ahora ya no mete sus dedos pero sigue con sus dientes, sus labios, su lengua. Uffff!!!!

Paró, se irguió para mirarme, de rodillas en la cama. Yo seguía con mis piernas abiertas, mirándole a los ojos, esperando que es lo que quiere hacer ahora. Me encantaría que me follara con esa polla que acaricia entre sus manos. Ahora me tiene tan loca que me apetece todo, me siento muy perra y cualquier cosa me vale. Me tiraría a comerle la polla pero se que quiere tener el control. Quiere mandar él y hoy desea que yo me someta a su voluntad. Así que, espero a que se decida por donde seguir mientras sigo masturbando mi clítoris. Lo tengo tan activo que no puedo dejar de tocarme. Llevo la otra mano a uno de mis pezones, duro, también erecto. Me encantan mis tetas!!! No se lo que ha pasado pero durante este confinamiento se me han puesto preciosas, duras… creo que ir sin sujetador todo el día ha ayudado a que estén como están. (El otro día me lo dijo Rocío cuando me las tocó, que estaban maravillosas, que qué había hecho!!!?)

Me va a follar, así expuesta. Su polla lo está deseando y mi agujero no puede estar más abierto y más jugoso para que entre ese miembro. Cuando siento esa polla dentro de mi me altero, me vuelvo mucho más loca, pierdo el sentido y le pido que me folle: “ Sigue, sigue, así, así… fóllame cabrón. Qué hijo de puta eres!! como te gusta mi coño!! y a mi coño le encanta que le folles como lo estas haciendo!!! “ le digo entre dientes. Eso le anima, madre mía. Bombea y bombea, me folla, me corro. … Siento tanto tanto todo que me abandono, mi cuerpo no depende de mi. Se lo entrego todo a él, para que con él haga lo que quiera por que me encanta todo lo que con él hace.

  • Date la vuelta, ponte a cuatro patas. Que te voy a reventar!!
  • Hmmm Si? me vas a reventar?

Bufff, puede que si me reviente. Según tiene la polla, como me coja duro puede que toque ese fondo maravilloso de mi coño que me hace disfrutar tanto. Me di la vuelta. Me expuse y me chupo el coño de nuevo, en esa postura. Me la mete hasta el fondo, es muy cabrón, sabe como me gusta. Mi cabeza y mi pecho están apoyados en el colchón y con una mano me masturbo, necesito sentir mucho, todo y con esa polla dentro me viene un orgasmo con el que mi cuerpo convulsiona. Sensacional.  Mis caderas se mueven en circulo para sentirle más. Métela toda, vamos!!!

Ahora, me susurra….. esa perversión del susurro sabe que me pone. Te lo digo suave para que sepas que te voy a reventar., debe pensar. Y me dice que me va a reventar el culo. Está ansioso, lo está deseando pero yo, también. Estoy tan en pompa y tan excitada que tengo el culo super abierto con un par de lametones que le ha dado antes. Pone la punta de su verga y va apretando sin mucho cuidado. Ese punto de dolor me encanta y cuando la tiene toda dentro comienza a follar apretando bien, ya está dentro. Sabe que estoy loca de placer. El no puede empujar más, si por él fuera me sacaba por el cabecero de la cama. Ahí no puedo hacer nada. Me dejo a su suerte, a su polla, a su hacer, a su follada. Me folla, me folla, le insulto, me abro, me corro. Esos espasmos hace que él tambien llegue a su orgasmo. No puede más. Deseo su leche dentro de mi culo. Cuando siento que se está corriendo me puede el placer y me vuelvo a correr.

Como primer asalto, no estuvo nada pero nada mal!!! jajajaja. Bueno, primer asalto porque luego ataqué de nuevo pero en ese instante me di por satisfecha, aunque, como os había comentado estoy muy salida últimamente.

Fuimos al sofá, hablamos de nuevo, nos abrazamos, nos besamos, nos mimamos y al rato, cuando él quería ya irse porque no quería que se le hiciera de noche, metí la mano en su calzoncillo que era lo único que llevaba puesto, agarré su polla y me la metí en la boca, blandita, pequeña, fresca, rica, sabrosa… ummmmm se me hace la boca agua de pensarlo y, el coño, también.

Fue creciendo en mi boca, se puso dura muy rápido, demasiado. Me habría gustado jugar con ella así, pequeña, un poco más. Cuando le crece, no me cabe toda en la boca, es otra manera de disfrutarla que tambien me gusta, pero es diferente. En una de las veces que me acerqué a besarle le dije que mi mesa del despacho estaba sin estrenar. Es una fantasía que teníamos Rodrigo y yo pero que, no se había hecho todavía realidad así que, creo que, de esta fantasía también se va a apoderar él.

  • Ponte en la mesa

Un escalofrío me recorrió. Quité el portátil, la agenda, algún papel y lo aparté a otro sitio aunque me habría encantado hacer como en las pelis…. apartarlo del tirón y echarlo al suelo, no lo hice. Me apoyé hacia adelante poniendo mi culo hacia él y en mientras quitaba las cosas ya tenía la polla dentro. Guauuuuu… folla, follame cabrón, como me gusta!!! Después de unas embestidas me pidió que me sentara en la mesa. Me senté con el vestido por la cintura y abierta de piernas, apoyando uno de mis pies en mi sillón y el otro en una silla. Estaba muy cómoda. Se agachó y volvió a comer coño de nuevo. Estaba mucho más sensible que antes. Llevaba mucha caña así que, cualquier roce le hace vibrar. Me corrí un par de veces y se levantó para que dejara ver esa maravilla de verga que tiene, que me vuelve loca. Se acercó a mi boca, me besó dejándome sin aliento y diciéndome que me ama, que me quiere… todo el sentimiento sale ahí mientras mi agujero se ve repleto de polla, de repente, sin apuntar, sin ayuda… están hechos el uno para el otro. La medida de la mesa es la perfecta. Su polla entra tocando las paredes superiores de mi coño y me da un placer muy especial. Folla, folla, mete, mete y saca muy rápido, aprieta hasta el fondo, me tiene a mil, me corro y sigue apretando. Bufffff…. Mis brazos abarcan su cuello y nos besamos mientras aprieta su verga contra mi. No se puede sentir más placer!!!!

Me lo llevo a la cama. Quiero que me penetre hasta todo lo que de, lo necesito, quiero algo muy salvaje. Me quedo en el borde de la cama a cuatro patas para que me pueda follar de pie desde el suelo. Y así lo hace. Agarra mis caderas para que toda, toda la polla entre hasta dentro y no tarda en correrse. Echa toda su leche en mi coño. Hoy ya la tengo en dos de mis agujeros. Nada me puede dar más placer.

Se nos sale la sonrisa de las caras. Han sido unos meses muy duros pero parece que volvemos a “alguna normalidad”. Deberemos de buscar la nuestra. Todo está patas arriba. Los locales no van a abrir en breve, nos da respeto quedar con gente nueva y eso va a condicionar nuestra sexualidad, no cabe duda. Lo que si se es que, los dos, somos capaces de sacar lo mejor de nosotros mismos en cualquier situación. Con tal de estar juntos, ambos, con Rocío, con más hombres, con más mujeres…. creamos morbo en cualquier situación porque de los dos emana ese morbo.»

 

Por Estefanía Mor de «40 historias de sexo»

 

 

 

 

También te gustará: «Ganas de más»