Otra de las insólitas conclusiones del Observatorio Gleeden de la Infidelidad*, promovido por Gleeden.com y publicado recientemente, es que el sentimiento de culpa tras una infidelidad no es la norma sino la excepción. Solamente uno de cada tres adúlteros españoles (36%) siente remordimientos tras su desliz.

Aunque esta falta de remordimientos puede parecer chocante, España encabeza el ranking europeo, en el segundo lugar por detrás del Reino Unido, donde la mitad de los infieles se sienten culpables. Cierra la clasificación Italia, donde solamente 1 de cada 4 infieles se arrepiente de su aventura.

El estudio también demuestra que el amor no es incompatible con la infidelidad: 2 de cada 3 españoles cree que se puede querer a su pareja aun teniendo una aventura, contra el 60% de los ingleses, o el 57% de los italianos.

*Estudio realizado por el instituto IFOP de 7 al 9 de enero 2014, sobre una muestra de 4.879 personas de más de 18 años de España, Francia, Italia, Bélgica, Alemania y el Reino Unido.