La excitación de lo desconocido
Es bien sabido que lo desconocido y la novedad pueden resultar excitantes, tanto para las mujeres como para los hombres. Un/a amante se puede considerar como una montaña rusa de sensaciones, provocando emociones a veces muy intensas, haciendo sentir cosas desconocidas hasta el momento. Esa excitación tiene efectos muy buenos en la libido, a menudo atrofiada por la rutina y el aburrimiento.
Hay que admitir que la experiencia juega un papel importante en todo esto. La libido en las mujeres aumenta con el tiempo, para llegar a su punto álgido hacia los cuarenta. A esa edad, una mujer conoce mejor su cuerpo que con 20 años, y el hecho de tener pareja desde hace varios años permite conocer mejor lo que le gusta y lo que no. En cuanto a los hombres, su momento álgido llega desde la madurez sexual, es decir en la adolescencia, y empieza a decaer hacia los 35 años. Claro está, puede haber excepciones, todo depende del entorno socio-cultural, de las experiencias, etc.
La vida pasa (demasiado) tranquilamente…Conoces a tu amante en tu web favorita y sales de la rutina gracias a él (o ella). Todo empieza con un simple encuentro virtual, intercambios de palabras, descubrir cómo es el otro gracias a las fotos del álbum privado. El placer de tener un jardín secreto hace aumentar en cierta medida el deseo hacia el otro, hasta pasar al encuentro real (y quizás físico…). Buscas la famosa chispa, que encienda la llama que quizás se ha apagado con tu pareja por el paso del tiempo, ¡pero que seguro se va a reavivar!
¡Ha llegado el momento!¡Ya está, es el momento! Estás con él (o con ella) en el lugar que habéis elegido juntos. Te has preparado mentalmente (y seguramente físicamente). Vas a poder experimentar ciertas cosas que estabas deseando, pero que quizás no eran posible con tu pareja. ¡Tus hormonas están en ebullición! Hacía tiempo que no habías sentido eso, o lo acabas de descubrir ahora, esa sensación que te hace sentir más vivo/a que nunca.
TU libido es mucho más fuerte por la parte emocional, ¡aprovéchalo y sé imaginativo/a! Encuentra un pequeño «truco» que despierte todos tus sentidos, seguramente los más experimentados/as lo encontraréis fácilmente, y para los demás, lo más fácil es probar. Puede ser la ocasión de hacer realidad tus deseos y de aprovechar esa libido latente.
